Dile adiós a las várices con tratamientos ambulatorios y resultados casi inmediatos, con especialistas calificados de gran trayectoria.
AgendateRealizamos estudio, diagnóstico y tratamiento de los diferentes trastornos que afectan a las venas y los vasos linfáticos, de manera que se puedan prevenir distintas enfermedades que comprometen a estas estructuras.
Ayudamos a eliminar alteraciones visibles con compromiso estético, sintomatología dolorosa que interfiere con la actividad diaria, así como también, la aparición de alteraciones dérmicas (dermatitis, eczema, varicorragia o úlceras) causadas por problemas vasculares
Dermatitis eccematosa, área enrojecida de la piel, pruriginosa, puede ser extensa abarcando toda la pierna, puede verse como reacción a algún tratamiento tópico.
Ocurre cuando se forma un coágulo de sangre en una vena profunda. Estos coágulos por lo general se forman en la parte inferior de las piernas, los muslos o la pelvis, pero también pueden aparecer en el brazo.
La insuficiencia venosa crónica produce estancamiento de la sangre dentro de las venas y un incremento importante en la presión que éstas ejercen sobre la grasa y la piel. La hipertensión constante daña los tejidos ocasionando adelgazamiento, endurecimiento e hiperpigmentación de la piel.
Consiste en un dolor de larga duración en la parte baja del abdomen, causado por la acumulación de sangre en las venas de la pelvis, que se han ensanchado (dilatado) y se han vuelto tortuosas.
La ablación química de varices es un procedimiento médico utilizado para tratar las venas varicosas. Consiste en la inyección de una solución química en las venas varicosas, lo que provoca una reacción que hace que las venas se cierren y eventualmente se desvanezcan.
El tratamiento se realiza típicamente en un consultorio médico y no requiere anestesia general. El médico utiliza una aguja pequeña para inyectar la solución directamente en las venas varicosas. La solución irrita las paredes de las venas, provocando que se cierren y se endurezcan. Con el tiempo, el cuerpo absorbe estas venas selladas y desvanece su apariencia.
Existen diferentes tipos de tratamientos de ablación química, como la esclerosis con espuma o la esclerosis líquida, dependiendo del calibre y características de cada caso, para varices tronculares se utiliza la espuma mientras que los líquidos de menor concentración de fármaco se utilizan para las variculas y telangiectasias (arañitas). Cada uno usa diferentes tipos de soluciones químicas para lograr el cierre de las venas varicosas.
Es importante tener en cuenta que, si bien la ablación química puede ser efectiva para tratar las venas varicosas, no previene la aparición de nuevas venas varicosas en el futuro. Es crucial seguir las recomendaciones médicas post-tratamiento, como el uso de medias de compresión y cambios en el estilo de vida, para ayudar a prevenir la recurrencia de las venas varicosas.
La radiofrecuencia endovenosa es un procedimiento médico utilizado para tratar las venas varicosas. Es una técnica mínimamente invasiva que usa calor para cerrar y tratar las venas varicosas de manera efectiva.
Durante el procedimiento de radiofrecuencia endovenosa, se introduce un catéter en la vena afectada. Este catéter transmite energía de radiofrecuencia a la pared de la vena, lo que calienta y colapsa la vena enferma. El calor generado por la radiofrecuencia hace que la vena se cierre y, con el tiempo, se desvanece a medida que el cuerpo la reabsorbe.
Este tratamiento se realiza típicamente bajo anestesia local y se considera menos invasivo que la cirugía tradicional para las venas varicosas. La radiofrecuencia endovenosa generalmente se realiza como un procedimiento ambulatorio y puede permitir una recuperación más rápida que la cirugía convencional de venas varicosas.
La radiofrecuencia endovenosa es efectiva para tratar venas varicosas de tamaño moderado a grande y puede brindar alivio de los síntomas asociados, como dolor, hinchazón y problemas de circulación.
Como con cualquier procedimiento médico, es esencial discutir los riesgos, beneficios y el seguimiento necesario con un profesional de la salud antes de someterse a la radiofrecuencia endovenosa para tratar las venas varicosas.
La ablación venosa mecanicoquímica es un procedimiento relativamente nuevo para el tratamiento de venas varicosas. Combina dos técnicas: la mecánica y la química para cerrar las venas varicosas.
En este procedimiento, se usa un dispositivo especial que combina un catéter con una punta rotativa que daña la pared interna de la vena y al mismo tiempo aplica una solución química esclerosante. La punta rotativa crea lesiones mecánicas en la pared venosa, mientras que la solución química esclerosante, similar a la usada en la esclerosis convencional, contribuye al cierre de la vena al irritar sus paredes y facilitar su colapso.
La combinación de la lesión mecánica y la acción química destruye la vena enferma, lo que eventualmente lleva a su desaparición al ser reabsorbida por el cuerpo.
Es esencial discutir con un profesional de la salud especializado en el tratamiento de venas varicosas para obtener información detallada y actualizada sobre este procedimiento y sus implicaciones.
El stenting de vena iliaca es un procedimiento médico en el que se coloca un stent en la vena iliaca para tratar la obstrucción o estrechamiento de esta vena, específicamente en la zona que conecta la pelvis con la vena cava inferior (la vena principal que recibe sangre de las piernas y la parte inferior del cuerpo).
Las venas iliacas, que son importantes para el retorno venoso de las piernas hacia el corazón, pueden obstruirse o estrecharse debido a varias condiciones, como trombosis venosa profunda, compresión de la vena (por ejemplo, debido a tumores o quistes), o afecciones que restringen el flujo sanguíneo.
El procedimiento de stenting de vena iliaca implica la colocación de un stent, que es un tubo metálico en forma de malla, en la vena iliaca para mantenerla abierta y permitir un flujo sanguíneo adecuado. El stent se inserta en la vena mediante un catéter, guiado por imágenes de rayos X o ultrasonido, que se coloca a través de una pequeña incisión generalmente en la ingle. Una vez posicionado, el stent se expande para mantener abierta la vena y facilitar el flujo sanguíneo.
Este procedimiento se utiliza para tratar la obstrucción o el estrechamiento de la vena iliaca y puede aliviar los síntomas asociados con la insuficiencia venosa de las piernas, como la hinchazón, el dolor y la fatiga.
El stenting de vena iliaca es un procedimiento relativamente seguro y efectivo, pero como cualquier procedimiento médico, puede conllevar riesgos, como la migración del stent, coágulos sanguíneos, infección o reacciones alérgicas al material del stent.
Es esencial discutir con un especialista vascular o un cirujano vascular las opciones de tratamiento, los riesgos y los beneficios específicos para determinar si el stenting de vena iliaca es apropiado en un caso individual.
Especialista en Angiología y Cirugía Vascular Periférica
Facultad de Medicina - Universidad de la República - Uruguay (2001 - 2009)
Universidad de la República - Facultad de Medicina - Uruguay (2014-2017)
Universidad de la República - Facultad de Medicina - Uruguay (2012-2017)
Descripción actuación profesional
Especialista en Angiología y Cirugía Vascular Periférica
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